Desde China estiman que “no solo el asentamiento humano en Marte ya no sería una ciencia ficción, sino que también habría esperanza de descubrir rastros de vida en el planeta”.
Por DIARIO DEL PUEBLO digital, Fan Anqi y Deng Xiaoci
Un legislador del principal contratista espacial de China, la Corporación de Ciencia y Tecnología Aeroespacial de China (CASC), reveló este jueves en el contexto de las “Dos Sesiones” que China tiene como objetivo llevar a cabo una misión de retorno de muestras de Marte, a realizarse alrededor del año 2030. Mientras tanto, un asesor político de CASC destacó que este año se espera ver una variedad de cohetes reutilizables que se presentarán o realizarán sus vuelos inaugurales, incluida una de las series de vehículos de lanzamiento tripulados de nueva generación del país.
Sun Zezhou, diputado de la Asamblea Popular Nacional (APN) e ingeniero principal de CASC, afirmó que el propósito de la misión de retorno de muestras de Marte es buscar agua. Si se encuentran recursos hídricos accesibles, proporcionarían un valioso apoyo para futuras exploraciones interestelares.
"No solo el asentamiento humano en Marte ya no sería una ciencia ficción, sino que también habría esperanza de descubrir rastros de vida en el planeta", explicó Sun.

Además, dado que Marte ha evolucionado antes que la Tierra, sirve como un espejo: su estudio puede proporcionar advertencias sobre el futuro de la Tierra.
Anteriormente, China logró con éxito la órbita, el aterrizaje y la exploración de Marte a través de la misión Tianwen-1. En el futuro, la misión Tianwen-3 se centrará en la recuperación de muestras, que podría tener lugar alrededor del 2030. Cuando llegue a Marte, será aproximadamente otoño o invierno en el planeta, afirmó Sun, citado por CCTV.
El diputado explicó que, a pesar de que China ha acumulado cierta experiencia en la exploración del espacio profundo, Marte está mucho más lejos de la Tierra y difiere significativamente de la Luna. Despegar de la Luna requiere superar un sexto de la gravedad de la Tierra, mientras que Marte requiere superar un tercio. Además, se deben tener en cuenta los efectos aerodinámicos de la atmósfera de Marte, incluida la resistencia que ejerce sobre la sonda y las limitaciones en el diseño aerodinámico. Se necesita más energía para transportar la misma masa de carga útil desde la superficie marciana hasta la órbita de Marte, incluyendo nuevas limitaciones y desafíos.
En 2025, China planea lanzar la misión de exploración de asteroides Tianwen-2, con el objetivo de realizar un sobrevuelo cercano de un asteroide cercano a la Tierra y devolver muestras. Tianwen-3 llevará a cabo una misión de retorno de muestras de Marte, explorando el entorno marciano, mientras que Tianwen-4 estudiará Júpiter y sus lunas, investigando el entorno espacial y la estructura interna de Júpiter, precisó un comunicado de CASC obtenido por el Global Times.
También este jueves, Rong Yi, representante de CASC y miembro del XIV Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPCh), manifestó al Global Times que este año, China presentará y realizará vuelos inaugurales de múltiples cohetes reutilizables.
"Con la recuperación y reutilización de cohetes, podemos esperar frecuencias de lanzamiento más rápidas y costos más bajos, lo que hace que el acceso al espacio a gran escala, rápido y flexible sea cada vez más factible", ratificó Rong.
China ha estado impulsando activamente avances en la tecnología de cohetes reutilizables. El año pasado, tanto CASC como el desarrollador espacial comercial LandSpace completaron con éxito pruebas de despegue y aterrizaje vertical de 10 kilómetros para cohetes reutilizables. Este año, varios vehículos de lanzamiento reutilizables, incluidos el Zhuque-3 y el Tianlong-3, se someterán a vuelos inaugurales o pruebas relacionadas. Además, el cohete tripulado de próxima generación de China también incluirá una versión reutilizable, reveló Rong al Global Times.
Rong anunció que además de los vehículos de lanzamiento tripulados de nueva generación componen una serie con al menos dos configuraciones: una es el Gran Marcha-10, diseñado para misiones lunares, mientras que la otra es un cohete más pequeño destinado a transportar tripulación y carga a la estación espacial.
Este último es muy adecuado para la reutilización y la recuperación, lo que lo convierte en un foco clave para el desarrollo futuro.
“Ambas configuraciones están progresando sin problemas y se lanzarán tan pronto como sea posible”, añadió Rong.
Como el principal desarrollador de cohetes del país, CASC completó con éxito 51 misiones espaciales en 2024, enviando más de 190 naves espaciales a la órbita.
El informe de trabajo del gobierno de este año, presentado el miércoles a la legislatura nacional para su deliberación, volvió a plantear la promoción del "desarrollo seguro y sólido del espacio comercial", señalando que China promoverá el desarrollo integrado y agrupado de tales industrias emergentes estratégicas junto con otros esfuerzos para fomentar las industrias emergentes y futuras.
Respondiendo activamente al llamado nacional, CASC ha estado aprovechando sus ventajas en tecnología, productos, talento e infraestructura para coordinar recursos e impulsar la innovación y el desarrollo en vuelos espaciales comerciales.
En 2024, los vehículos de lanzamiento Gran Marcha-6C y Gran Marcha-12 completaron sus vuelos inaugurales, mientras que el cohete comercial de combustible sólido Jielong-3 realizó dos lanzamientos marítimos exitosos. También se han logrado avances significativos en la tecnología de cohetes reutilizables, incluido el desarrollo independiente de un motor de oxígeno-queroseno líquido reutilizable de 130 toneladas, que completó dos pruebas de ignición en tierra y un total de 15 pruebas repetidas.
El año pasado, CASC también logró su primera prueba de despegue y aterrizaje vertical de 10 kilómetros con un vehículo de lanzamiento reutilizable.
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